Debbie Reynolds, amor por el cine.

Además de por sus películas, sobre todo por Cantando bajo la lluvia. Debbie Reynolds se hizo famosa por su amorosa fascinación de coleccionar todo lo relacionado con el cine. Afición que trasmitió a su hija Carry Fisher, juntas intentaron crear un museo en Hollywood que no salió adelante por la falta de apoyos. Durante un tiempo su colección se expuso en el hotel de su propiedad en Las Vegas, pero una situación económica crítica obligo a desprenderse del hotel antes que de su colección. 

Además de miles de artículos, la colección incluía más de 3500 vestidos y unas 20.000 fotografías. Pero no eran cosas sin importancias, era la historia del cine en sí misma. Los vestidos de Judy Garland en “El mago de Oz“; Audrey Hepburn en “My Fair Lady“, y la túnica de Charlton Heston en “Ben Hur”, el bombín de Charlie Chaplin, el vestido de Marilyn Monroe en “La tentación vive arriba“, o el de Vivien Leight en “Lo que el viento se llevó“; los zapatos de Judy Garland en “El mago de Oz“; el abrigo de piel de Orson Welles en “Ciudadano Kane“, trajes de Cary Grant, Frank Sinatra o Fred Astaire; la peluca de Harpo Marx o cámaras y equipos de rodaje de películas míticas, incluyendo material para los efectos especiales de “La Guerra de las Galaxias“, entre otros miles de maravillosas cosas, formaban parte de la colección Reynolds.  

Debbie intentó vender la colección completa a la academia de cine de los Estados Unidos, pero no hubo un acuerdo. Su trabajo, al recopilar y cuidar esas piezas, logró que miles de estos objetos se salvaran de una muy posible desaparición, aunque finalmente subastó parte de la colección para poder mantener el resto. 

El día 27 de diciembre de 2016 Carrie Fisher falleció como consecuencia de un infarto a los 60 años. Al día siguiente, falleció su madre, Debbie Reynolds por un derrame cerebral consecuencia del shock por la muerte de su hija. Una parte de las cenizas de Carrie fueron depositadas junto a su madre por voluntad de ambas. 

 El resto de la colección fue subastado por Todd Fisher, hijo de Debbie y hermano de Carrie, tras ambos fallecimientos. Todd subastó 1.500 recuerdos personales, entre los que se encontraban la casa en la que vivieron juntas, el vestido de seda que Debbie llevó en Cantando bajo la lluvia, los zapatos rojos de rubíes que llevó Judy Garland en su papel de Dorothy en El mago de Oz, y todo fue donado a organizaciones benéficas.  

Enlace del catalogo de la colección Reynolds.


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